China lanzó una nave robot para recolectar rocas de la Luna, la primera apuesta de cualquier país para recuperar muestras de la superficie lunar desde la década de 1970 y una misión que subraya las ambiciones del gigante asiático sobre el espacio.
La misión Chang’e-5, llamada así en honor a la antigua diosa de la Luna en la mitología china, tratará de recolectar material lunar para ayudar a los científicos a entender más sobre los orígenes y la formación del satélite terrestre.
El Long March-5, el cohete transportador más grande de China despegó a las 04:30 hora de Pekín (20:30 GMT del lunes), antes del amanecer, desde el Centro de Lanzamiento Espacial de Wenchang en la provincia insular sureña de Hainan, llevando la nave espacial Chang’e-5.
Si tiene éxito, la misión convertiría a China en el tercer país que obtiene rocas lunares, después de Estados Unidos y la Unión Soviética.