En el distrito de Baños del Inca, antes lugar de descanso y tranquilidad, ahora se ha convertido en una ciudad que al transitar en la noche por sus calles se requiere de mucho cuidado.
El sábado 24 de junio, y como muchas otras noches en fin de semana, en la “Discoteca Carnavali” ubicada en el jirón Huayna Cápac 111, realiza fiestas y alborotos con música y volumen muy alto para la tranquilidad de los vecinos y para el malestar de los pacientes del puesto de salud del distrito. Esta discoteca Carnavali se encuentra a una cuadra del centro médico.
Al parecer esta discoteca no cuenta con autorización de la municipalidad distrital de los Baños del Inca, los fines de semana realizan fiestas con jóvenes adolescentes de ambo sexos. Es así que esa noche al promediar las 10 de la noche se pudo ver y escuchar la pelea entre jóvenes y adolescentes, quienes luego de su trifulca ingresaron a la discoteca, para volver a pelear a media noche con piedras botellas rotas y actitudes delincuenciales.
Algunos de los vecinos escribieron a El Nuevo Diario para exigir al serenazgo de Baños del Inca, mayor intervención, ya que al ser llamados para intervenir en la zona no llegaron, “solamente se pasearon por el parquecito a un costado del rio Chonta con sus luces encendidas” señalaron.
A la media noche se volvió a llamar al serenazgo por la segunda pelea, llegaron a la calle Huayna Cápac, disuadieron el altercado entre los jóvenes y se retiraron. Y la fiesta continuó unas horas más.
“Los vecinos de las calles adyacentes a la discoteca hacen un llamado al señor alcalde los Baños del Inca para no permitir ruidos molestosos y sus altercados. Y regresar al silencio y tranquilidad del distrito” escribieron en una misiva a nuestro medio de comunicación.
