La Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral – SUNAFIL, confirmó que adolescentes estarían siendo explotados, trabajando por 11 horas al día, y en ocasiones de lunes a domingos y sin feriados, con sueldos miserables de 500 soles.
La jefa del organismo supervisor narró que fueron los mismos menores de edad quienes conformaron que trabajan allí por necesidad, y que entran a las 9 de la mañana y salen a las 8 de la noche. Y sólo tendrían algunos minutos para almorzar.
Lo grave de este caso, es que además los menores de edad no contarían con la autorización respectiva de sus padres para ejercer la labor que les encargan en los puestos de venta del mercado ubicado en el jirón Apurímac, a pocas cuadras de la Plaza de Armas.
Yliana Galindo Peralta, Intendente de SUNAFIL en Cajamarca señaló que la falta de estos empleadores es considerada muy grave, por lo que serán procesados administrativamente para ser objeto de multas, pero además podrían también ser denunciados en la Fiscalía de Familia, por explotación laboral de menores.
El Nuevo Diario dialogó con un menor de 15 años, de quien reservamos su identidad, quien nos comentó que se encarga de trasladar algunos bultos de una tienda ubicada en el mercado San Antonio hasta el un centro comercial ubicado a dos cuadras, y que solamente le pagan 200 soles al mes, porque no tiene horario de trabajo y sólo lo emplean cuando lo requieren, sin embargo, él permanece allí por varias horas esperando que lo puedan llamar.
“Vivo sólo con mi mamá, porque mi papá no vive en Cajamarca y no nos pasa pensión” señaló el menor quien además reconoció que estudia por las tardes en un colegio estatal de Cajamarca.
Para trabajar NJHH tiene que caminar desde El Ronquillo hasta el mercado para poder ganar algunos soles y ayudar a su madre con los recursos.
La necesidad de estos menores habría dado lugar a que estos malos comerciantes contraten informalmente a los menores.
