Sexemayo, es una de las comunidades del centro poblado Cumbe Mayo en el distrito de Cajamarca ubicada a 4 mil metros sobre el nivel del mar; por tanto, se trata de uno de los lugares cajamarquinos que ya viene siendo afectado por el descenso brusco de las temperaturas. Incluso los casos de enfermedades respiratorias agudas van en aumento, siendo los niños menores de 5 años, los más afectados.
Olvidados
El Nuevo Diario llegó hasta la comunidad de Sexemayo, que por ser el lugar de mayor altura en el distrito de Cajamarca es aprovechado por los canales nacionales de televisión para instalar sus antenas retransmisoras, pero si bien gracias a la altura de este cerro es que podemos ver con nitidez TV Perú o Panamericana televisión, también es uno de los lugares más abandonados por las autoridades, según dicen los mismos pobladores y sus autoridades.
“Acá vivimos con las justas, pero no tenemos acceso a ningún programa social como Juntos, Pensión 65 o Vaso de Leche. Acá las autoridades sólo llegan en campaña política, y de ahí se olvidan de nosotros dice”, vecina del centro poblado, El Cumbe, a tan sólo 30 minutos de Cajamarca.
Congelados
Los últimos días Cajamarca ha sufrido la disminución de la temperatura llegando hasta los 4,9 grados en la madrugada, cifra que baja aun más de acuerdo a la altura, justamente en Sexemayo de donde no hay valores la gente supone que se llega por debajo de los cero grados, principalmente entre las 6 de la tarde y las 8 de la mañana, producto de ello quienes más sienten las consecuencias, son los niños y los adultos mayores.
“La semana pasada hemos tenido días muy fríos, según los padres, un frío que no se ha sentido de manera común en esa zona” cuenta el profesor Juan Quispe, director de la escuela primaria del lugar, quien además refiere que esos días los niños no asisten, al padecer gripes y hasta bronquitis o neumonías. En efecto en uno de los salones multigrado las niñas se cubren con ponchos de lana, para soportar el frío, pese a que son las 12 del día y el sol quema fuerte, pero bajo sombra el frío no perdona.
El frio de la indiferencia
Más allá del frío congelador de las bajas temperaturas, el profesor Quispe señala que hay un frío que ataca con más fuerza, y es el frío de la indiferencia, y es que la mayor parte de los vecinos de Sexemayo viven en condición de pobreza o indigencia, sus casas son material rústico permeable al frío, y la poca ropa que tienen apenas abriga.
“Nosotros apelamos a la solidaridad de gente que traiga ropa de abrigo que los niños puedan usar y hacer frente a las bajas temperaturas” pero además de la solidaridad también hace falta la llegada de las autoridades de salud para controlar la situación de los niños y entregar medicamentos a los que ya están mal “Desde mayo a la fecha, nunca he visto a alguien del puesto de salud o a alguien ligado a este sector hacer una tarea preventiva” narra el docente.
Camino de vuelta, en una pequeña casa una joven madre trata de envolver a su bebé de 1 año y medio con lo que tiene para evitar que se enferme, hace un mes estuvo agripado y hasta no podía respirar, lo llevó al centro de salud, pero como no había cupo tuvo que regresarse. “desde ahí ya sólo lo curo con hierbitas, porque si me pongo a esperar a los médicos, mi hijo se muere” dice descontenta María Isabel Pérez Terán.
Se viene lo peor
De acuerdo a los pronósticos del SENAMHI y las alertas del Indeci, los próximos días el frío arreciará más, y si no se aplica una política preventiva o de control oportuno, estaremos lamentándonos.
Para culminar esta nota solicitamos entrevistas con representantes del Hospital Regional de Cajamarca y de la Red de Salud. Seguimos esperando la respuesta de ambos.